●Era un niño con la cabeza rapada durante su época escolar, y pasó su juventud inmerso en el béisbol sin jamás tomar de la mano a las niñas. Sin embargo, recientemente empezó a entrenar un equipo de béisbol juvenil a petición de un estudiante de último año de su ciudad natal, y las madres mayores empezaron a burlarse de él. La Sra. Nakayama, a quien le encanta coser, trajo un bolso hecho a mano. El Sr. Tokushima trajo verduras que había cosechado en el huerto de su casa. Cuando llevé a mi mamá a casa, quien vino a visitar mi departamento,