Ryota lamenta que no podrá ver a Emi por un tiempo porque está en un viaje de negocios a la zona. Emi se siente sola y le ruega que le envíe una carta en video todos los días, pero le cuesta tomarse selfies, a lo que no está acostumbrada. Además, Emi acepta tímidamente la petición de Ryota de enviarle un vídeo sexy, pero...