¡Moeka Marui asume el desafío de coprotagonizar un harén por primera vez! ¡Un maravilloso sándwich cercano donde Aoi Kururugi, la encarnación del dulce sadismo, y cuatro hombres masoquistas son acariciados, objeto de burlas, lamidos, retorcidos los pezones y exprimidos semen de sus coños increíblemente calientes! El placer de ser provocado con una sonrisa pícara y de ser objeto de burlas con un pequeño juego diabólico que requiere que te desmayes de agonía... Dulce y estimulante.